La Universidad de Lund en Suecia desarrolló un nuevo método para mejorar el sabor de análogos cárnicos con el uso de nuevas tecnologías y materias primas. Así anunciaron en nota los investigadores, que encabezaron este proyecto académico.
Los microorganismos son una herramienta poderosa para la innovación de la industria alimentaria. Los microorganismos son omnipresentes en la industria alimentaria, jugando un papel crucial en la producción de una amplia gama de alimentos y bebidas.
El proyecto Supralem de AINIA estudia cómo optimizar la producción de proteínas alternativas a las de origen animal a partir de biomasas acuáticas, como la lenteja de agua o las microalgas. El proyecto está dirigido al estudio de la producción de biomasas acuáticas alternativas, para el desarrollo de nuevos alimentos funcionales basados en proteínas vegetales de manera sostenible.
El grupo francés Digital FoodLab publicó un informe sobre las mega tendencias que revolucionarán la industria de los alimentos a lo largo de 2024. El informe dijo que las proteínas sustentables están ganando fuerza en el mercado pese a la reciente caída en las ventas de carnes alternativas.
Investigadores de China han desarrollado un marco basado en IA para predecir y visualizar la transformación del color de los cítricos en los huertos, que indica cuándo los frutos están lo suficientemente maduros para la cosecha. La técnica está programada para mejorar el desarrollo de la fruta y el momento óptimo de la cosecha, con aplicaciones potenciales en otras especies de cítricos y cultivos frutales.
Mediante el uso del aprendizaje automático y la tecnología satelital, los investigadores están trabajando con los agricultores de Maui para abordar la seguridad alimentaria y reconstruir la agricultura local con un enfoque en la tradición local. Para muchos agricultores hawaianos, la agricultura es más que una profesión; Es su kuleana, o responsabilidad. Es una práctica con profundas raíces culturales ligadas al antiguo concepto de aloha ʻāina: amor y administración responsable de la tierra.
Esta tecnología es necesaria para vigilar los procesos operativos, pues una falla en la cadena puede representar pérdidas millonarias por tratarse de productos perecederos, aseveró Leonardo Vieira, director general y cofundador de Tractian.
Alemania ha revelado los resultados de varios programas de control que analizan la carne de aves, las aceitunas, el queso de leche cruda y los calamares. Como parte del seguimiento de las zoonosis de 2022, Campylobacter y Salmonella se detectaron con mayor frecuencia en patos de engorde que en pollos de engorde. Según la Oficina Federal de Protección al Consumidor y Seguridad Alimentaria (BVL), por primera vez se incluyeron patos en las pruebas.
Los investigadores han desarrollado un inmunoensayo de flujo lateral (LFIA) basado en nanopartículas de emisión inducida por agregación de lectura dual para la detección rápida cualitativa y cuantitativa de E. coli O157:H7 en los alimentos.
Copptech es un mejorador del análisis del ciclo de vida de los empaques de alimentos. Cuanto mayor es la calidad y frescura, mayor es la durabilidad de los alimentos. Su vida útil depende no sólo de su conservación, sino también de la calidad de sus empaques, porque los alimentos llegarán al consumidor en el mejor estado posible, desde el punto de vista nutricional y sensorial.
Si los coches autónomos pueden identificar objetos como otros coches o semáforos, ¿por qué no utilizar la inteligencia artificial (IA) para identificar bacterias dañinas en los alimentos? Resulta que esta no es una idea tan descabellada. "La gente está utilizando la IA para cambiar sus vidas", afirmó Luyao Ma, investigador del Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de California, Davis. "Como científicos de los alimentos, podemos incorporar este conocimiento al sistema alimentario agrícola".
México y América Latina contribuyen de manera significativa al comercio de productos frescos. Según las estadísticas de la USDA:
77% de las importaciones a los EE. UU. provinieron de México en 2020.
63% de los trabajadores agrícolas en los EE. UU. nacieron en México.
Esto plantea una pregunta evidente: si la industria depende en gran medida de una fuerza laboral predominantemente de habla hispana, ¿por qué la mayoría de las soluciones digitales de inocuidad alimentaria están exclusivamente en inglés?